

La seguridad de los habitantes es lo primero para el sheriff del condado. 48 de los 50 estados federales de los Estados Unidos emplean los servicios de un sheriff, un agente de la ley especialmente elegido para hacer cumplir la ley. Para perseguir a los delincuentes en zonas a veces muy rurales con largos tramos de carreteras federales, el sheriff necesita toda la potencia disponible que puede generar un motor, como el legendario Dodge Challenger SRT. El motor V8 de este hot rod puede desarrollar unos atronadores 700 caballos de potencia. Los anchos neumáticos hechos de material engomado tienen dificultades para domar y transferir una potencia tan enorme a la carretera, por lo que el chirrido de los neumáticos está garantizado. Los faros integrados le dan a este hot rod el aspecto de una bestia feroz. Las puertas se pueden abrir de par en par, lo que hace que el esfuerzo de entrar y salir del coche sea muy sencillo. El Dodge, que sirve como vehículo oficial del sheriff del condado, está pintado en el característico blanco y negro de la policía estadounidense y también lleva la insignia dorada y las letras SHERIFF en los laterales. No queda más que encender la luz azul y salir en persecución.